El Parque y los jardines del Castillo

El parque de los bojes, el prado y el paseo de los tilos, los jardines del castillo…

Con la llegada del buen tiempo, el frescor perfumado del sotobosque realza las notas suaves y amaderadas, mientras que en otoño, la niebla matinal dibuja un paisaje onírico y cautivador. A lo largo de las estaciones, el parque ofrece un decorado de colores cambiantes, creando una atmósfera impregnada de romanticismo. No es raro divisar corzos, liebres y jabalíes.

La terraza y el césped

La gran terraza es una invitación al descanso, el lugar ideal para tomar el desayuno cuando hace buen tiempo, mientras que el amplio césped ofrece a los huéspedes la posibilidad de relajarse, disfrutar del entorno exterior acondicionado u organizar un cóctel, un vino de honor o una ceremonia de boda.